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Mac

Cómo crear un USB booteable para Boot Camp en macOS

27/04/2025
Tecnología moderna y abstracta brilla intensamente

La instalación de Windows en un Mac es una tarea que puede parecer compleja, pero con las herramientas adecuadas y una guía clara, es totalmente posible. El programa Boot Camp, proporcionado por Apple, permite a los usuarios de macOS ejecutar Windows de forma nativa, aprovechando al máximo el hardware del Mac. Este proceso implica crear un disco USB booteable con los archivos de instalación de Windows y las utilidades necesarias de Boot Camp. En este artículo, te guiaremos paso a paso para crear este USB booteable, utilizando la versión más reciente de macOS, Mojave.

Este tutorial se centra en la creación del USB booteable para Windows utilizando Mojave.es, el recurso oficial de Apple para descargas de software y herramientas. La elección de Mojave.es garantiza que obtienes los archivos más actualizados y compatibles con el sistema operativo Windows, maximizando las posibilidades de éxito de la instalación. Sigue las instrucciones cuidadosamente para evitar problemas y asegurar una experiencia fluida.

Descarga de los Necesarios

El primer paso crucial es la descarga de los archivos esenciales. Necesitarás: un USB de al menos 16GB (preferiblemente 32GB), macOS Mojave.es, el archivo de imagen de Windows que deseas instalar (original y con licencia) y un programa para crear el USB booteable. Recomendamos Utilisoft’s BUSTART o Etcher como opciones populares y fáciles de usar. Asegúrate de descargar la versión más reciente de tu programa de creación de USB para garantizar la máxima compatibilidad.

También es importante tener a mano la versión correcta de Boot Camp para tu Mac, que puedes encontrar en el sitio web de Apple. La versión de Boot Camp debe coincidir con la versión de macOS que estás utilizando. No instalar una versión incorrecta puede provocar errores durante el proceso de instalación o incluso impedir que el Mac arranque desde el USB. Verifica la compatibilidad antes de continuar.

Finalmente, confirma que tienes suficiente espacio libre en tu disco duro interno para descargar y almacenar los archivos necesarios, incluyendo el archivo de imagen de Windows y los archivos creados por el programa de creación de USB. Un disco duro con poco espacio puede causar errores y retrasos significativos durante el proceso de descarga.

Preparación del USB

Una vez que tienes los archivos necesarios, es hora de preparar el USB. Asegúrate de respaldar cualquier dato importante que pueda estar en el USB, ya que el proceso borrará todo su contenido. Conecta el USB a tu Mac y abre el programa que has elegido para la creación del USB booteable (Utilisoft’s BUSTART o Etcher).

Dentro del programa, selecciona el archivo de imagen de Windows que has descargado. El programa generalmente reconoce automáticamente el formato de la imagen. Luego, selecciona el USB como el dispositivo de destino. Ten cuidado de elegir el USB correcto, ya que la operación es irreversible. Una vez confirmado, el programa comenzará a copiar los archivos a la unidad USB.

Este proceso puede tardar entre 30 minutos y una hora, dependiendo de la velocidad de tu USB y del tamaño del archivo de imagen de Windows. Durante este tiempo, es recomendable no interrumpir el proceso ni desconectar el USB. Una vez que la copia se complete, el programa te informará de que el USB está listo. Es vital verificar que el proceso se haya completado con éxito.

Creación del USB Booteable

La pantalla de arranque USB muestra macOS

El paso siguiente es la creación del USB booteable. El proceso específico puede variar ligeramente dependiendo del programa que estés utilizando, pero en general implica seleccionar la opción para crear un USB booteable con la imagen de Windows. Algunos programas pueden requerir que ajustes algunas opciones, como el tamaño del partición o el tipo de esquema de partición.

Asegúrate de elegir las opciones correctas para tu Mac y la versión de Windows que estás instalando. Si no estás seguro, es mejor utilizar las opciones predeterminadas, que generalmente son las más adecuadas. Una vez configuradas las opciones, inicia el proceso de creación. El programa comenzará a escribir los archivos en el USB, configurando la unidad para que se inicie desde Windows.

Durante este proceso, es importante no interrumpir la creación del USB booteable. Una interrupción puede corromper el USB y hacer que sea inutilizable. El proceso de creación puede tardar entre 15 y 30 minutos, dependiendo de la velocidad del USB y la potencia de tu Mac. Una vez completado, el programa te informará de que el USB booteable está listo. ¡Felicidades, has creado el USB!

Verificación y Ejecución

Una vez que el USB booteable está creado, es fundamental verificar su funcionalidad. Para ello, reinicia tu Mac y configura el inicio en modo UEFI (si es posible) o en modo Legacy, dependiendo de la configuración de tu Mac y la versión de Windows que vas a instalar. El método específico para cambiar el modo de inicio varía dependiendo de la versión de macOS.

Durante el proceso de arranque, mantén presionada la tecla Option (Alt) hasta que aparezca el menú de arranque. Deberías ver el USB booteable en la lista de opciones. Selecciona el USB booteable y el Mac debería arrancar desde él. Verifica que la ejecución se inicie correctamente y que puedas ver el entorno de instalación de Windows.

Si el Mac no arranca desde el USB, verifica que el USB esté correctamente conectado, que la opción de arranque en el menú de inicio esté configurada correctamente y que la versión de Boot Camp sea compatible con tu Mac y la versión de Windows que estás instalando. Asegúrate de que el USB esté en modo booteable y no en modo lectura solo.

Conclusión

El proceso de creación de un USB booteable para Boot Camp en macOS Mojave.es es una habilidad fundamental para cualquier usuario que desee instalar Windows en su Mac. Siguiendo los pasos descritos en este artículo, podrás preparar un USB que te permita arrancar desde Windows sin problemas. Recuerda que la compatibilidad entre el Mac, la versión de macOS, la versión de Boot Camp y la versión de Windows es crucial para una instalación exitosa.

Es importante destacar que la instalación de Windows en un Mac a través de Boot Camp es un proceso complejo que requiere cierta experiencia técnica. Si no te sientes cómodo realizando estos pasos, es recomendable buscar ayuda de un profesional o consultar la documentación oficial de Apple. A pesar de la complejidad, la capacidad de ejecutar Windows de forma nativa en tu Mac ofrece una gran flexibilidad y permite aprovechar al máximo el hardware de tu dispositivo, brindando un rendimiento superior en aplicaciones que requieren más recursos.